07 May La puesta en marcha de la piscina. ¡Llega el buen tiempo!
Prestar atención a las claves de la puesta en marcha de la piscina cuando llega el buen tiempo te ahorrará muchos problemas de cara al verano. Y es que recuperar el agua no es la única tarea que hay que hacer cuando suben las temperaturas. Merece la pena revisar una pequeña lista de cosas importantes y apostar por la buena salud de toda la instalación:
El estado del agua:
Si el color se ha vuelto verdoso y ves el agua muy turbia, necesitarás hacer un tratamiento químico de choque. En poco tiempo tu piscina volverá a estar transparente. En Aquablau solemos recomendar a los clientes hacerse con un pack compuesto por cloro rápido, minorador de pH y floculante clarificador en pastillas. Pero es importante que revises cómo está la alcalinidad del agua antes, porque si no, no conseguirás controlar los niveles de pH. La alcalinidad deberá estar entre los 125-150 ppm (partes por millón).
Otro valor a tener en cuenta antes de la puesta en marcha es el nivel de ácido isocianúrico del agua. Se trata de un residual que puede llegar a ser alto por ejemplo por un abuso del cloro (las pastillas de cloro suelen contar con él como estabilizador, para que dure más tiempo su función desinfectante), o porque el agua de la piscina sea demasiado antigua y lleve mucho tiempo estando en mal estado. En tal caso, puede llegar a anular parte del efecto del cloro, y la única opción es vaciar parte de la piscina para reponerla con agua nueva. Un nivel óptimo de ácido isocianúrico en el agua de una piscina podría estar entre 20-30 ppm.
Calibrar el equipo de desinfección y regulación automática:
Si revisas las sondas de análisis te aseguras de realizar una lectura correcta de los valores de pH y/o Redox (ORP) para la dosificación. Cuando hayas conseguido devolver al agua su claridad, comprueba la acidez y mantén un pH entre 7 y 7,5. Así el agua será saludable para las personas, el revestimiento y accesorios de tu piscina no sufrirán, y el cloro desinfectará bien. El cloro, por su parte, deberá mantenerse entre 0,5 y 1,5 ppm.
Revisar el estado de la célula del equipo de cloración salina:
Mantener una piscina con cloración salina siempre es mucho más fácil. Lo normal es que haya que añadir al agua cada año entre dos y tres sacos de sal de 25kg, de forma que la concentración salina sea de 3-6gr/l. Eso sí, es importante que compruebes que no hay restos calcáreos en el interior de la célula del clorador salino, que es el electrodo de titanio en el que se produce el hipoclorito a partir de la sal que hemos añadido al agua. Además debes tener en cuenta que cada célula tiene una vida útil. Esto depende del fabricante, si bien hay factores como la dureza del agua y la climatología que también influyen. En Aquablau nos gusta por ejemplo trabajar con cloradores salinos de la firma Hayward, cuyas células suelen estar diseñadas para trabajar unas 8000 horas. Cuando transcurre ese tiempo la producción de cloro empeora, por lo que hay que sustituir la célula por una nueva.
Cambiar la arena del filtro:
Saber por qué es importante cambiar la arena del filtro es fundamental si quieres tener la piscina siempre perfecta. Se tiene que hacer aproximadamente cada cinco años para evitar que la arena apelmazada por su desgaste provoque problemas. Contribuye a que la depuración sea más profunda, evitando por ejemplo el temido biofilm con el que se protegen las bacterias del agua. Sustituir la arena de sílex por vidrio activo es una opción muy acertada que recomendamos desde Aquablau: la filtración se volverá mucho más eficiente y ahorrarás agua.
Es hora de aumentar las horas de filtración de la depuradora:
Más allá de la presencia de bañistas, lo que más contribuye a que se degrade el agua de una piscina son los rayos del sol y las temperaturas altas, por la evaporación del producto químico y la generación de algas. Por eso cuando empieza el calor hay que aumentar las horas de filtración. Normalmente se incrementan paulatinamente hasta llegar a un máximo porcentual en junio, coincidiendo con el comienzo de la temporada de baño. Divide el volumen de tu piscina en litros por el caudal en litros/hora del motor de tu depuradora y obtendrás esas horas de filtración necesarias. En temporada alta de baño, con mucha actividad de bañistas, lo ideal es que todo el agua de la piscina pase por la depuradora un par de veces en total a lo largo del día.
Plantéate qué tiempo puedes dedicar en los meses venideros a la limpieza manual de la piscina.
Un robot limpiafondos automático facilita mucho estas tareas y puede ser una buena inversión a considerar. Los metros de tu piscina y la forma que tenga es lo que determina el tipo de robot que te irá mejor. Pídenos consejo y saldrás de dudas si te decides a hacerlo.
En Piscinas Aquablau contamos con un servicio técnico profesional capaz de realizar todas las tareas de la puesta en marcha de la piscina. También forma parte de nuestro servicio de mantenimiento técnico preventivo anual. Contáctanos para que dejemos tu piscina perfecta y así no tengas que preocuparte por nada.
